¿Sabías que los pólipos y las medusas son dos etapas distintas del ciclo biológico de un mismo animal?
Una medusa es un animal de estructura simple, con un cuerpo en forma de campana y con unos tentáculos que, en la mayoría de las especies, contienen células urticantes. Se mueven libremente por el agua mediante contracciones de su cuerpo y son arrastradas por el viento y las corrientes marinas. Seguir leyendo Pólipo y Medusa, dos momentos en la vida del mismo animal→
Un arrecife de coral en buen estado de conservación sirve de hogar a una ingente cantidad de organismos, estableciéndose entre ellos unas relaciones muy complejas. Todos estos delicados equilibrios pueden romperse muy fácilmente debido a la contaminación, degradación de los fondos, pesca con explosivos o cianuro, así puede escribirse una lista interminable.
El medio acuático ha permitido el desarrollo de organismos pluricelulares que no tienen una región cefálica diferenciada ni un aparato locomotor que le permita desplazarse de un sitio a otro. El alimento y el oxígeno que necesitan para respirar lo obtienen directamente del agua, mientras que para la reproducción vierten al medio los gametos. Para asegurar la fecundación es necesario la producción y emisión de gran cantidad de células reproductoras.
Los grandes ejemplares de meros han contribuido a dar a conocer a las islas Medes, un pequeño archipiélago que forma parte del Parque Natural del Montgrí, les illes Medes i el Baix Ter. Anualmente miles de buceadores visitan L’Estartit y las islas Medes para conocer los paisajes submarinos y la fauna de este Parque Natural. Desde la década de los 70 estas islas han sido el campo de trabajo de muchos científicos que estudian la ecología marina de la zona litoral.
«El mero, un gran desconocido» muestra como es la reproducción del mero y otros aspectos interesantes de la vida de este gran pez. Este documental fue grabado y realizado por Manel González en 1998 en las islas Medes, L’Estartit. Hasta la fecha, junio 2015, son las únicas imágenes grabadas en las que se muestra completo este interesante proceso biológico del mero del mediterráneo.
El buceo nos permite descubrir grandes paisajes submarinos y los organismos que viven en ellos. Muchos de estos seres han tardado años, quizás décadas, en desarrollarse puesto que su crecimiento suele ser muy lento. Un «encaje de venus» o una «gorgonia», por ejemplo, han necesitado más de 30 años para adquirir la forma y el tamaño que actualmente tienen. Si no se va con cuidado y se evita romperlos un buceador puede ocasionar un impacto del cual el medio que tardará años en recuperarse. Esto tiene mucha importancia en los puntos de la costa más visitados puesto que el efecto es acumulativo y, evitentemente, el mar no tiene tiempo de recuperarse de todas estas agresiones.